viernes, 19 de junio de 2009

EN ESA FUGA SINIESTRA DE LA RAZÓN

En esa fuga siniestra de la razón,
perdió el rancho que cobijaba su alma simple.
Dejó escapar la fe,
se escurrió por aquella rejilla grasienta,
esa,que funestamente se lleva todo.
Con un aire nuevo
una siesta cualquiera
se perdió entre esos árboles,
altos,quietos,eternos.
se perdió entre sus vientos.
Y voló
voló inquietamente como aquellos pájaros,
asustado,desamparado.
En esa fuga siniestra de la razón,
dejó el rancho que cobijaba su alma simple.
Lo sorprendió un zoológico lleno de razones que desnudar.
Se mezcló entre aquella álgebra
y voló
y se fue.
Y voló.
Nunca quiso volver.

EN ESTE PEREGRINAJE DE BÚSQUEDAS ETERNAS

En este peregrinaje de búsquedas eternas,
interminables.
A veces
llegando a algún puerto
aparece la sortija
y un premio condecora tanta espera.
A veces
la espera es demasiado
para tanta alma
y pira,pira,pira.
En medio de estas redondeces,
tantos círculos concéntricos
confunden,ahogan...ahogan.
Y a veces
en este mismo peregrinaje
se arriba a destino
casi
sin darse cuenta.