domingo, 27 de septiembre de 2009


¡Hemos caminado tánto!por dentro y por fuera y desde esta ventana interior veo EL EDÉN florecido,con un sol abrazante,enriquecedor.Aquí quiero quedarme,en este rincón del mundo donde pasa la vida plácidamente y nos acuna festejando simplemente el estar vivos bajo un sol abrazante,no abrazador.
Pocas cosas tienen importancia y desde aquí pueden verse mejor,sentirse,experimentarse.
Siento que aquello de allá de Baires,es una locura en la que insisten en meternos a todos y nosotros nos sometemos,como si no pudieramos hacer otra cosa,más que aceptar esa lcoura y enloquecernos.